Para que la operación de una empresa sea exitosa, es necesario hacer uso de diferentes herramientas e indicadores financieros que ayuden a confirmar si las acciones realizadas están logrando los objetivos planteados. Realizar evaluaciones constantes de lo que se hace y cómo mejorarlo es una actividad propia de los empresarios más destacados del mundo.
Con el fin de obtener un panorama real de lo logrado y de los alcances que tiene cada una de las decisiones empresariales, lo recomendable es utilizar herramientas tan útiles y objetivas como los indicadores financieros.
Existen diversos indicadores financieros que miden variables que ayudan a evaluar el progreso de una empresa e identifican los ajustes necesarios para que los objetivos se cumplan, de acuerdo con lo programado. En otras palabras, funcionan como un radar que da seguimiento al rumbo actual que sigue la empresa.
Este indicador muestra la diferencia existente entre las ventas y el costo de los productos o servicios. Su función es determinar el porcentaje de cumplimiento de las metas con las proyecciones comerciales, el margen de utilidad y la contribución que generan esas ventas.
Para las empresas es de vital importancia tener bajo control los costos, los gastos y las inversiones; es decir, ser estratégicas con el manejo del flujo de efectivo. A mayor flujo de efectivo, mayor rentabilidad.
Contar con la liquidez necesaria para operar es primordial en una empresa, ya que de esto depende su permanencia en el mercado y su crecimiento. Los empresarios deben tener una estrategia clara para mantener, incrementar y acelerar el flujo de efectivo para hacer frente a sus compromisos de pago en tiempo y forma. Es en este rubro donde los empresarios deben asegurarse de contar con acceso a fuentes confiables de crédito y financiamiento, para sortear las brechas de liquidez con éxito e invertir en nuevos proyectos sin descapitalizarse.
Este indicador muestra elrendimiento en relación con la inversión realizada en la empresa. Si el retorno es bajo o negativo, lo recomendable es detener esa inversión y destinar ese capital a alguna otra actividad más rentable. Si el rendimiento es conveniente, el emprendedor debe tomar decisiones estratégicas para incrementarlo.
Estar al frente de una empresa en tiempos de crisis es una ardua tarea; por tanto, contar con diversas estrategias para controlar y mejorar la operación ayudará a obtener los resultados más óptimos. La innovación continua permite que las empresas obtengan la preferencia de sus clientes y, por ende, se posicionen como una oferta destacada del mercado.
